Respiramos constantemente, sin siquiera pensarlo. Es una acción tan automática que pasa desapercibida. Pero, ¿te has detenido a pensar en el poder que tiene la respiración? Saber qué es el pranayama, una práctica milenaria del yoga, nos invita a transformar la respiración en un acto consciente y deliberado.

Desde Ehia, te explicamos qué es el pranayama y cómo esta técnica puede cambiar tu vida, a través de un camino de autodescubrimiento y bienestar. De esta manera, se armonizará tu cuerpo, mente y espíritu. 

¿Qué es el pranayama?

La palabra «pranayama» tiene su origen en el idioma sánscrito, donde «prana» significa «respiración» o «energía vital», y «yama» se traduce como «control» o «disciplina». Por lo tanto, pranayama se interpreta como «control de la respiración» o «expansión de la energía vital». Esta práctica es fundamental en el yoga y se considera uno de los ocho pasos esenciales descritos por Patanjali en los Yoga Sutras, un texto fundamental del yoga que data de más de 2000 años atrás.

Prana: la energía vital

En la filosofía del yoga, el «prana» es visto como la fuerza vital que permea todo el universo. Es la energía que sostiene tanto el cuerpo como la mente. 

Esta energía vital se encuentra en el aire que respiramos y en los alimentos que consumimos, pero también circula a través de nuestro cuerpo en una red de canales energéticos conocidos como «nadis». Por eso, mantener un flujo equilibrado y libre de prana es esencial para la salud y el bienestar.

Yama: control y disciplina

La palabra «yama» implica control, disciplina y regulación y se refiere a la regulación consciente de la respiración. Este control es físico, pero también mental y espiritual, lo cual promueve un estado de armonía y equilibrio interno.

¿Cuáles son los objetivos del pranayama?

Imagina tu cuerpo como un río de energía vital, fluyendo sin obstáculos, llenando cada célula de bienestar. Esa es la esencia del pranayama: un viaje hacia el interior para desbloquear el potencial que reside en nuestra respiración y despertar la energía vital que nos habita.

Técnicas de pranayama

Existen una gran cantidad de técnicas de pranayama que implican diferentes patrones de inhalación, exhalación y retención del aire, cada una con su propio objetivo: 

• Puraka: inspiración o inhalación.
• Rechaka: espiración o exhalación.
• Antar Kumbhaka: retención de aire después de la inhalación.
• Bahir Kumbhaka: retención sin aire en los pulmones después de la exhalación.

Además, cada una de estas técnicas se puede regular en términos de duración y ritmo para producir efectos específicos en el cuerpo y la mente. Por ejemplo, una inhalación profunda seguida de una retención prolongada puede ayudar a aumentar la energía y la concentración, mientras que una exhalación lenta y controlada puede inducir relajación y calma.

Beneficios del pranayama

Mediante la práctica del pranayama, a través de la respiración consciente, podemos obtener una gran cantidad de beneficios que abarcan aspectos físicos, mentales y también espirituales. Las ventajas que ofrece esta práctica tendrán un impacto positivo en tu calidad de vida, pero también en tu bienestar integral y un equilibrio profundo: 

En el plano físico mejora la salud 

El sistema respiratorio y cardiovascular se fortalecen al practicar pranayama, lo que mejora la capacidad pulmonar y la eficiencia del corazón. 

¿Por qué? Porque al regular la respiración, se optimiza el intercambio de gases en los pulmones, lo que aumenta el oxígeno disponible para el cuerpo y elimina el dióxido de carbono de manera más eficiente. Asimismo, la práctica regular de pranayama puede reducir los niveles de estrés y ansiedad, lo que ayuda a promover un estado mental más equilibrado y relajado.

Purificación de las vías respiratorias y pulmones

Existen dos técnicas de pranayama en particular, Kapalabhati y Bhastrika, que tienen un efecto purificador sobre las vías respiratorias y los pulmones. 

Ayudan a eliminar el moco y otras impurezas, aspecto que mejora la salud pulmonar y facilita una respiración más libre y sin obstrucciones. Además, la limpieza regular de las vías respiratorias puede prevenir y aliviar afecciones respiratorias comunes como el asma y la bronquitis. 

Mejora la circulación sanguínea y purificación de la sangre

La respiración consciente mejora la circulación de oxígeno en todo el cuerpo, incluyendo el corazón. Esto lo hace trabajar de manera más eficiente y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Además, el pranayama ayuda a que la sangre fluya mejor por las venas y arterias, lo que reduce la presión arterial y previene la formación de coágulos. Como ya sabemos, el estrés es un factor importante que contribuye a las enfermedades cardíacas. El pranayama, al reducir el estrés, ayuda a proteger tu corazón.

Beneficios para el proceso digestivo

Técnicas como la respiración abdominal y Kapalabhati masajean suavemente los órganos internos, lo que estimula la digestión y mejora la absorción de nutrientes. Además, estas prácticas pueden aliviar problemas digestivos como el estreñimiento y la indigestión. 

Prevención de enfermedades

Otro de los sistemas del cuerpo que se ve beneficiado es el  inmunológico, ya que mejora la función de los órganos internos y promueve la circulación de los fluidos corporales. Algunas enfermedades como resfriados comunes o afecciones crónicas pueden prevenirse con una respiración adecuada y regular. Incluso, al reducirse el estrés, mejora el bienestar general y se contribuye  a una mayor resistencia a las enfermedades.

Otorga vitalidad y disuelve bloqueos energéticos

El pranayama es una poderosa fuerza que revitaliza el cuerpo al aumentar el flujo de prana (energía vital) a través de los nadis (canales de energía). Esto disuelve los bloqueos energéticos que pueden causar fatiga y enfermedad, para restaurar así el equilibrio y la vitalidad. La práctica constante de pranayama energiza el cuerpo y promueve un mayor nivel de energía y bienestar.

Estimulación de la memoria, la concentración y el rendimiento intelectual

A través de técnicas de respiración consciente podemos mejorar la función cerebral porque se produce un aumento del suministro de oxígeno al cerebro. Gracias a esto se estimula la memoria, mejora la concentración y aumenta el rendimiento intelectual. Entonces, se ayuda a  a mantener la claridad mental y la agudeza cognitiva.

Proporciona calma y serenidad

En un mundo cada vez más acelerado y exigente, encontrar la calma y la serenidad se ha convertido en un anhelo para muchos. El pranayama nos ofrece un camino poderoso para alcanzar ese estado de paz interior que tanto buscamos.

Reduce los niveles de cortisol

El cortisol es la hormona del estrés, responsable de la respuesta de «lucha o huida» de nuestro cuerpo. Al controlar la respiración, podemos disminuir la producción de cortisol, induciendo un estado de relajación profunda.

Activa el sistema nervioso parasimpático

Este sistema es responsable de la respuesta de «descanso y digestión». Al estimularlo a través del pranayama, podemos calmar la mente, reducir la ansiedad y promover una sensación de bienestar general.

Conecta contigo mismo

Queda claro que una correcta respiración puede tener grandes beneficios que van mucho más allá de mejorar la salud física. El pranayama se convierte en una poderosa técnica que puedes practicar para mejorar tu salud y conectar contigo mismo. 

¿Te gustaría intentarlo? En Ehiä creemos que cada una de estas prácticas es un viaje de amor propio. Por eso, te acompañamos para que mediante esta práctica física y espiritual logres una conexión entre tu cuerpo y tu mente. Si deseas conocer más sobre nosotras o nuestras terapias, ponte en contacto para que podamos ayudarte.